Si le preguntases a tu abuelo, o bisabuelo, qué es la enea, su respuesta sería extensa y apasionante. Ya que han sido muchos quienes se han dedicado a trabajar esta planta para crear todo tipo de cestas y sillas de enea. Pero por desgracia, como muchos otros trabajos rurales, la elaboración de las sillas de enea ha ido desapareciendo, aunque aún en Valdepeñas de Jaén encontramos muy buenos artesanos que siguen manteniendo vivo el origen de las sillas de enea.
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¿Qué es la enea?
La enea, también conocida como anea, espadaña, totora o gladio, es una planta herbácea del género Typha, familia de las tifáceas.
Esta planta se caracteriza por sus hojas alargadas acintadas y tallos cilíndricos sin nudos, que tienen en su extremo pequeñas flores que forman una inflorescencia en espiga, con una reconocible forma de puro.
Las flores de enea son unisexuales, las femeninas forman esta forma de puro, y las masculinas cuentan además con un extremo que sobresale.
Aunque lo más destacable en esta ocasión al hablar sobre qué es la enea, es que sus hojas son perfectas para hacer asientos de sillas, y otros muchos objetos de cestería: Largas, estrechas, tenaces y muy flexibles.
Estas hojas se recojen cuando aún están verdes, por la mañana, a final de mayo o principios de junio. Una vez recogidas, se extienden hasta que se secan del todo, con cuidado de que no se pudran durante su almacenamiento. Lo adecuado es mantenerlas tapada durante el día y descubiertas durante la noche, cambiándoles de postura para que seque igual por todas partes. Poco a poco, las hojas de anea van perdiendo su verde característico y se van volviendo amarillentas. En tres o cuatro días ya estará lista para trabajar con ella.
En el momento de usarlas, las hojas de enea se van humedeciendo para poder recuperar la flexibilidad que se fue perdiendo en el proceso de secado.
Cuando la enea está lista, puede aguantar mucho tiempo sin estropearse ni perder cualidades. Aunque para ello es importante saber cómo almacenarla y mantenerla lejos de la humedad.
¿Para qué sirve la enea?
La enea es la principal materia prima para la elaboración de las típicas sillas andaluzas, elaboradas con trenzados de enea en el respaldo y el asiento.
Aunque al uso tradicional de la enea para hacer esteras y asientos de sillas, se suma en la actualidad el uso para depuración de aguas residuales. Ya que se aprovecha la tolerancia de esta planta a las aguas y suelos contaminados.
La enea se usa junto a otras especies de ambientes acuáticos en los humedales artificiales, que se usan para la depuración de aguas en núcleos de poblaciones pequeños. Este sistema de depuración de aguas fomenta la creación de espacios verdes artificiales, con un nulo impacto negativo en la naturaleza.
Sillas de Enea en Jaén
Hoy en día aún se conservan algunos museos rurales y zonas de Andalucía en las que sigue siendo tradición utilizar la Enea para la fabricación de todo tipo de muebles, cestas y otros accesorios. Sin irnos más lejos, en Valdepeñas de Jaén encontrarás productos totalmente artesanos, elaborados con enea a manos de nuestros grandes artesanos, que han ido aprendiendo este oficio de generación en generación.
Ahora que sabes un poco más sobre qué es la enea, si quieres conocer más a fondo los orígenes de esta planta como materia prima en sillería y cestería, no dudes en visitarnos y conocer de cerca esta tradición tan arraigada a nuestra tierra. Los trabajos con Enea han formado parte de la historia del municipio desde hace décadas, y nuestro deseo es que pueda seguir haciéndolo mucho más.